Saque Usted su propia conclusión III

Dios es amor, Soy hijo del amor

Saque Usted su propia conclusión

III

Por Lic. Iván H. Contreras

El país sigue confuso, consternado, el salario no le alcanza y no es que sea mucho o poco lo que devenga, es la perdida del poder adquisitivo, es la inflación. Pero a que se debe esto: continúa la dependencia petrolera, la quiebra o reducción de la producción interna de los productos de la cesta básica, se sigue importando en cantidades grandes, el estado tiene dos países en uno, el imaginario y el real. Sigue atacando a la economía privada, sigue utilizando los MERCAL y PDVAL para manipular al pueblo desde su estomago, para doctrinar a la gente partiendo desde sus necesidades básicas, humillando y poniendo de rodillas a parte de la población buscando los insumos alimenticios de manera de llevar a sus hogares.

Pero tanto va el cántaro al agua que se parte, tanto se llena el vaso de agua que se derrama, tanto se acosa la paciencia que se revienta.

Luego encontramos otro mal en las pésimas políticas de este gobierno, el cual existe debido a las malas e equivocadas de los que gobernaron en la 4ta. La falta de mantenimiento, adecuación, ampliación, construcción e inversión económica de manera de adecuar las instalaciones, las redes de todos los servicios que una población necesita en el día a día como son los servicios básicos de agua, luz, gas, vialidad, salud y educación entre otras.

Las malas políticas educativas, que solo han querido dividir a este sector, dividiendo los planes, los pensum, el organigrama existente, por otro adoctrinado a politiquerías ideológicas partidistas y no cónsonas a la realidad y necesidades del este mundo globalizado tecnológico digitalizado e industrializado.

Todas estas malas políticas han llevado al país hacer cuarto mundista, algo inexplicable, ya que con tanta riqueza material y humana se tenga este estancamiento perverso, dañino a la sociedad venezolana.

Pero si hay algo claro, no hay mal que dure cien años, ni cuerpo que lo resista. El mal y la oscuridad no pueden reinar eternamente sobre la luz del bien, del amor, de la paz.

Por ello hay que orar en familia, en el corazón individual de cada ser, hay que seguir el ejemplo de las enseñanzas de Jesús de Nazareth en su gran misericordia. Hay que buscar caminos de progreso, cambios positivos que conlleven a la armonía y el bienestar integral de la persona. Continua…….